Lo llaman flyboarding, y es un nuevo deporte que algunos definen como una mezcla entre bucear y esquiar sobre el agua.
Consiste en una tabla a propulsión de agua conectada a una moto acuática encargada de darle toda la potencia que se necesita para poder impulsarse. Gracias a esta propulsión, quien va montado en la tabla puede elevarse hasta una altura de ¡12 metros!
Te preguntarás "¿cómo funciona?". Muy fácil, la manguera del flyboard se conecta a la moto de agua y hay dos opciones: o bien controla alguien desde la moto o bien puedes controlarlo tú mismo desde la tabla (mucho más divertido).
Del planeador en el que vas subido salen dos potentes chorros que permiten la elevación y los puedes manejar a tu antojo a través del movimiento de las piernas; son los encargados del 90% de la propulsión. Las boquillas que hay donde van las manos sirven para que puedas mantener el equilibrio, tal y como harías si llevaras los bastones de esquí.
No necesitas experiencia previa, pues en tan sólo unos 15 minutos el 95% de las personas que lo han practicado están volando. Y no sólo eso, sino que también puedes sumergirte bajo el agua y volver a salir a la superficie.
¿A quién se le ocurrió la idea? El creador es Franky Zapata, un campeón francés de motos de agua que decidió emprender en el negocio de motos acuáticas y de otros "artilugios" como el flyboard.
Desde 100€ durante 15 minutos podrás sentir que vuelas con la ligereza de un pájaro y nadas con la soltura de un pez. Serán, sin duda, los 100€ mejor invertidos en risas que habrás invertido nunca.
¡No te lo pierdas! ¡Haz como el Duende Verde o Silver Surfer y sobrevuela las olas!
Fuente: Yumping
Fotos: Trackdays.co.uk