En 1986, Peter Cook tuvo la idea de hacer crecer una silla. Nueve años más tarde se asoció con Becky Northe. Juntos, a lo largo de estos 25 años han dominado el arte que llaman Pooktre, el arte de transformar los árboles a medida que crecen para darles formas de personas o incluso de "mobiliario vivo".
Las especies más utilizadas son el ciruelo-cerezo (Prunus cerasifera) y el cerezo negro americano (Prunus serotina).Comienzan mediante la plantación de pequeños transplantes, de unos 30 centímetros, y los hacen crecer en torno a un marco de alambre que se corresponde con la forma deseada. Incluso, han hecho crecer un pequeño bosque de sauces con árboles que parecen personas, y al que llaman "el pueblo de los árboles".
Así, hacen crecer las piezas en su "enfermería" y, cuando están suficientemente desarrolladas, las transplantan al jardín de su cliente. Los árboles también pueden ser cortados y secados para servir como sillas o marcos de espejo.
Fuente: Telegraph.co.uk y Pooktre.