Es una de las diez mejores rutas de los Picos de Europa en Cantabria y transcurre durante 14,5 Km. entre la estación de teleférico de Fuente Dé y la propia Fuente Dé.
Fuente Dé es la puerta de acceso más frecuentada del Parque Nacional de los Picos de Europa. Lo es gracias al teleférico de Fuente Dé.
Situado en la cabecera del valle de Liébana, con un vuelo de pocos minutos salva los 753 metros de desnivel del circo de Fuente Dé y deposita a los viajeros en la alta montaña cantábrica.
Una vez aquí, las opciones para la caminata son numerosas, aunque la más recomendable para un primer contacto, por su facilidad y esfuerzo moderado, es la ruta que alcanza la parte superior de los prados de Áliva, para ascenderlos y empalmar con el sendero PR-PNPE24, que concluye en la estación inferior del teleférico.
Aunque en la subida desde la estación superior del teleférico a la Horcadina de Covarrobres hay que superar un desnivel de 90 metros, se recorren apenas sin esfuerzo.
El resto de la marcha es cuesta abajo. Este collado puede ser el punto final de los menos entrenados. Aunque eso sí, hay que andar unos cientos de metros por el lado de Áliva para disfrutar de la magnitud de estos prados.
Una vez sobrepasada la horcada, la pista desciende por los y pasa junto al Chalet Real, construido para albergar a Alfonso XIII en sus visitas cinegéticas a Picos.
Se deja atrás el Hotel Áliva, también en los prados y donde es posible tomar un refrigerio. A continuación, sigue el descenso hasta que la pista alcanza las portillas del Boquerón.
En este punto puede continuarse por la pista hasta Espinama, aunque es mejor seguir por el sendero que se inicia cruzado un puente de madera y que lleva a través de un espeso bosque hasta la trasera del parador de Fuente Dé, en el fondo del circo y a pocos metros del teleférico.
©Texto de El Mundo y Aventura Amazonia
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